La comunicación organizacional, institucional y política son una parte fundamental de su desarrollo profesional | Transitó la carrera de Comunicación Social en los noventa y tiene recuerdos todavía frescos de los y las docentes, así como de la militancia, que marcaron su camino | Natalia Enrico, en primera persona.
Eran los inicios de la década de los noventa y Natalia Enrico llegó a estudiar Comunicación Social desde Rafaela. «Fueron tiempos de estudio y de militancia pero sobre todo de profundizar en una gran sensibilidad por temáticas sociales, que me acompaña hasta hoy«, dice Natalia cuando recuerda los años de cursado. Además, menciona la fuerte impronta de construcción de pensamiento crítico y el trabajo de reflexión y acción de las cátedras.
Allí aparecen los nombres de docentes que la marcaron en su camino académico y humano: «Patricia Terrero, Juan Vilar, Gustavo Lambruschini, la entrañable Claudia Rosa, Sergio Caletti, Alicia Entel, Patricia Fasano. Las clases maravillosas de Noé Jitrik, que muchas veces venía junto a su compañera, Tununa Mercado. El Seminario de Procesos Culturales Argentinos y Latinoamericanos que dictaba Jitrik me marcó profundamente. Y quiero nombrar especialmente al querido Guillermo Alfieri, a quien tuve la posibilidad de acompañar como ayudante alumna en los talleres de Redacción y que tuvo un rol muy importante en mi amor inicial por el periodismo gráfico«, destaca Natalia.
También recuerda los cursos o los congresos de Comunicación «en los que tuvimos la posibilidad de compartir y ver pasar por nuestras aulas al inmenso Toto Schmucler, a Nicolás Casullo, a Susana Veleggia«.
«Amaba particularmente el Bar Los Alpes, que era una especie de continuidad de nuestras aulas –agrega, para no olvidar los espacios extra-académicos– y tanto entonces como ahora, no dejo de valorar el contenido de nuestra biblioteca«. Tampoco se olvida de nombrar a otras compañías del camino: «Tuve a inmensos compañeros y compañeras, entre ellos, a mi querida hermana Juliana, hoy docente de investigadora de CONICET».
Los primeros trabajos
Terminando el cursado de la carrera formó parte del Área de Extensión de la FCEDU, a través del Departamento de la Mediana y Tercera Edad y apenas egresada, ya de vuelta en sus pagos, empezó a trabajar en un diario local y después en áreas de prensa y de comunicación del Plan Estratégico del Municipio de Rafaela.
También como docente en las carreras de Lengua, Literatura y Comunicación Social en el Instituto del Profesorado y en Comunicación Social de UCES y UCSE, en cátedras vinculadas a redacción y a Teorías de la Comunicación. También como docente en el nivel secundario, en orientaciones relacionadas al campo de la comunicación social e institucional.
«De manera constante acompañé e integré equipos en instituciones y organizaciones sociales, la mayoría de ellas abocadas al trabajo con jóvenes y mujeres, realizando tareas de comunicación institucional. Menciono, entre otras, a la Fundación Espacios de Aprendizaje y Capacitación», señala Natalia.
Además, tal como en sus tiempos de estudiante universitaria, que fue Consejera Estudiantil, formó parte del Consejo Directivo en representación del claustro docente en su trabajo universitario.
Comunicación y política
Más adelante, su tarea la condujo «a la participación plena en el Partido Socialista, integrando la Mesa Directiva Nacional del PS Argentina y la Junta Provincial, en las áreas de derechos humanos, de la mujer y de asuntos municipales», cuenta Natalia.
Integró el gabinete político en la provincia de Santa Fe durante las gestiones del Frente Progresista Cívico y Social, de los años 2007 hasta 2013, en los Ministerios de Educación y de Gobierno y Reforma del Estado. «Un dato relevante –agrega– es que todos los ministerios contaban con profesionales del campo de la comunicación, muchos de ellos compañeras y compañeros egresados de nuestra Facultad de Ciencias de la Educación de Paraná, con muchos de los cuales compartimos instancias de trabajo y de articulación de tareas en el marco del programa de gobierno».
En el año 2013 y hasta 2017 fue electa concejala de la ciudad de Rafaela por el Frente Progresista. Y desde el Concejo «que tuve el honor de vicepresidir, también la comunicación fue el eje de muchos proyectos e iniciativas legislativas«, destaca.
También ha sido parte de la conducción nacional del Partido Socialista de Argentina, «donde junto a un equipo de politólogos y comunicadores sociales compartimos tareas relacionadas a la comunicación política partidaria«. Estas experiencias particulares de participación activa en campañas políticas la fueron llevando a participar de equipos interdisciplinarios, tanto en los ámbitos ejecutivo como legislativo.
Aprendizajes constantes
La tarea de la comunicación política la ha llevado actualizar de manera constante conocimientos, atravesada por el uso de nuevas tecnologías, por el rol de las redes sociales y el desafío de trabajo con diseñadores, realizadores audiovisuales, especialistas en comunicación política.
«Necesariamente fui parte del armado de mis propias piezas de comunicación. Y en todos los espacios institucionales y políticos en los que me desempeñé como funcionaria me tocó, además de los roles y funciones específicos, trabajar en el armado de textos, de guiones, de notas, de discursos políticos, de campañas«.
Toda su actividad laboral ha estado vinculada siempre al ámbito público, aunque ha acompañado trabajos, investigaciones y pasantías realizadas por sus alumnos y alumnas en empresas e instituciones privadas.
Cuando le preguntan qué se imagina hacia adelante, no tarda en contestar que «quisiera profundizar mis aportes y tarea orientada al campo de la comunicación comunitaria, trabajar en diversos espacios de micro política, en el desafío potente que hoy asumen muchas organizaciones sociales».
Antes de terminar pide que se incluya en la nota que es madre de Josefina, Augusto y Lisandro y que es abuela de Vera, porque sin los amores, no habría carrera que valga.
Producción general: Belén Cacik