Es Profesora y Licenciada en Ciencias de la Educación por la FCEDU- UNER y pronto defenderá su tesis para obtener el título de Licenciada en Psicología, carrera que cursó en la FHAyCS- UADER | Transitó distintas propuestas de posgrado vinculadas a las prácticas docentes y socioeducativas y actualmente es doctoranda en Ciencias Sociales (UNER) y se encuentra abocada a la escritura de su tesis de Maestría en Didácticas Específicas (UNL) | Se ha desempeñado como asesora pedagógica, en la modalidad Contextos de Encierro, en Institutos de Formación Docente | Actualmente integra equipos técnicos pedagógicos del Consejo General de Educación de Entre Ríos, se desempeña como docente en los niveles superior no universitario y superior universitario (UADER-UNL) y forma parte del equipo de la Secretaría Académica de la FCyT-UADER.
María de los Ángeles Fernández es oriunda de Paraná pero, por cuestiones personales, el secundario lo transitó en distintas escuelas de la provincia, entre ellas, la Escuela Almafuerte, donde terminó sus estudios. “Allí conocí y construí vínculos que no sólo dejaron huellas en mí sino también que me acompañaron a pensar a la educación, y a la escuela en particular, como la puerta de entrada a otros mundos, como la posibilidad de sostener y operar como anti-destino, como aquella práctica que posibilita la redistribución social de las herencias culturales, con toda la potencia transformativa que esto significa y el compromiso político de que ningún origen signifique una condena”, define.
De ese recorrido destaca la presencia de María Rosa Ríos, una egresada de la FCEDU, “una profesional comprometida profundamente con lo socioeducativo, buscando alojar de manera constante a quienes tuvimos la suerte de compartir su camino. Fue ella quien me propuso a las Ciencias de la Educación como una posibilidad”, recuerda. María Rosa le contó sus experiencias, la aconsejó y escuchó sus inquietudes iniciales. “Hoy que ya no está la reconozco, la celebro y la recuerdo con tristeza pero también con todo el amor que le ponía a su trabajo diario para lograr que el mundo sea un lugar más amable y con más oportunidades para les adolescentes”.
En 2007 comenzó la carrera de Ciencias de la Educación “con muchas ansiedades y también preocupaciones”. Hacía ya varios años que vivía sola “de modo que la cursada no era lo único en lo que me enfocaba”. Dice que el primer año la entusiasmó profundamente, las clases y las lecturas. “En principio me inclinaba solo por la Licenciatura pero con el transcurso de los años, de las propuestas y experiencias atravesadas, me enamoré del Profesorado, con sus desafíos y complejidades”.
La carrera operó en ella “como un gran movimiento”, como una suerte de conmoción, con desanudando “los sentidos comunes y cristalizados”. Así lo define: “El recorrido me posibilitó tener una mirada más abarcativa de la realidad, con su complejidad y sus múltiples dimensiones; a su vez, entender a las teorías como herramientas de pensamiento, que nos impulsan a tomar la palabra, a discutir sentidos y a leer el presente de manera crítica”.
Se desempeñó como auxiliar en el espacio de Didáctica IV y esta experiencia, como así también la de integrar el equipo de Investigación coordinado por María Amelia Migueles, “resultaron significativas y enriquecedoras para mi formación inicial”, resalta. Para ella, son “sumamente necesarias las inserciones de estudiantes en las cátedras como instancias fundamentales para el futuro desempeño profesional”.
Aproximadamente en la mitad de la carrera, decidió inscribirse en la Licenciatura en Psicología de la Facultad de Humanidades, Artes y Ciencias Sociales de la UADER. “Esto marcó un antes y un después no solo en mi vida, sino también en mi posición y mis lecturas del mundo”.
María de los Ángeles, o Mery, como le dicen, cuenta que transitó esta carrera con disfrute, sorprendiéndose, apasionándose, “complejizando y enriqueciendo la mirada en relación a las instituciones y a los efectos subjetivos de los discursos y las prácticas que tienen lugar en las mismas”. También, refueza, le permitió “entender la centralidad del trabajo docente con une misme, en tanto el trabajo con estudiantes conlleva la particular movilización de todo un mundo interno que se conmueve, que se reactualiza y que también puede resignificarse”.
A fines de este mes defenderá su Tesis de la Licenciatura en Psicología donde contó, inicialmente, con el acompañamiento Norma Barbagelata y luego con el de María Inés Monzón; “ambas docentes enormes de esta facultad y de FHAyCS”, resume.
Egresó en el 2014 del Profesorado en Ciencias de la Educación y, posteriormente de la Licenciatura en Ciencias de la Educación, donde agradece “profundamente el acompañamiento amoroso de Alicia Naput para llevar adelante la Práctica Curricular”.
Recorridos laborales
Una vez egresada del profesorado, trabajó en escuelas públicas de Nivel Secundario como Asesora Pedagógica, también en la modalidad Contextos de Encierro y en Institutos de Formación Docente donde se desempeñó como Coordinadora del Campo General de la Práctica Profesional y como docente en espacios de práctica; didáctica e instituciones educativas.
Desde el año 2014 hasta el 2018 fue tutora en distintos módulos de la Especialización en Políticas Socioeducativas del Ministerio de Educación de la Nación y luego, como parte del equipo de evaluación de dicha propuesta. “Esta experiencia resultó fundamental en mi trayecto profesional en tanto me permitió vincularme con colegas de todo el país, acompañar a docentes en una propuesta tan significativa como fueron los postítulos que dependían del Instituto Nacional de Formación Docente”.
Coordinó encuentros en Comodoro Rivadavia; Córdoba; Río Negro y Paraná. De esa experiencia, “destaco el equipo de trabajo conformado por Marisa Díaz; Humberto Escudero; Adriana Fontana; la coordinación general de Verónica Piovani y un gran grupo de coordinadores y tutores de todo el país, con formación diversa y compromiso político pedagógico. Al día de hoy sigo en contacto con compañeres de todo el país, sobre todo con quienes compartimos el trabajo en los módulos”.
Entre las experiencias significativas, también recupera el trabajo desarrollado en el marco de la Dirección de Educación de Jóvenes y Adultos del Consejo General de Educación, con la coordinación de Melina Romero. “Allí integré el equipo de profesores de la Especialización docente de Nivel Superior en Contextos de Encierro y, en conjunto con María de los Ángeles Sánchez, también egresada de esta facultad, estuvimos a cargo de la actualización académica para asesores pedagógicos de ESJAs de la provincia”.
Asimismo, participó en trabajos de coordinación, tutoría y evaluación en distintos concursos de oposición en la órbita del Consejo General de Educación. “Recuerdo de modo particular el concurso de antecedentes y oposición para acceder al cargo de secretaria de los distintos niveles y modalidades del sistema educativo entrerriano en el año 2017. Allí participé como coordinadora de contenidistas y estaba embarazada de Mateo, que nació en febrero de 2018. Las mujeres que decidimos ser madres seguimos desafiando las condiciones que impone el sistema patriarcal, los techos de cristal, los pisos pegajosos y seguimos construyendo modos que nos permitan que la opción de hierro no nos desarme y nos arranque posibilidades”, destaca. Y en ese sentido, completa: “La maternidad es política, recuerdo ir a trabajar con mi hijo, que mis compañeras me y nos sostengan. Creo que necesitamos habilitar algunos debates en los espacios de trabajo, en las escuelas, en las instituciones, que posibiliten atravesamientos menos dolorosos en instancias como estas, que conllevan un cambio de posición subjetiva”.
Formación de posgrado y trayectoria actual
En 2016 comenzó a trabajar en espacios de práctica del Profesorado Universitario de FHAyCS- UADER, una carrera destinada a profesionales de diversos campos disciplinares. “Esto me llevó a indagar en relación a cómo acompañar a los cursantes en la planificación y concreción de sus experiencias de enseñanza. Fue así como llegué a la Maestría en Didácticas Específicas, en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la UNL. Actualmente, me encuentro trabajando en la escritura de la Tesis”.
Transitó distintos itinerarios de posgrado, indagando en la conversación entre educación y psicoanálisis. “Cursé la Especialización y la Diplomatura en Psicoanálisis y Prácticas Socioeducativas y la Especialización y la Diplomatura en Currículum y Prácticas Escolares; la Especialización de Educación y DDHH, focalizándome allí en género y otras propuestas acerca de las prácticas docentes. Asimismo, transité el Doctorado en Ciencias Sociales de la UNER, que me brindó una mirada latinoamericana de las ciencias sociales”, sintetiza.
En cuanto a su situación laboral actual, integra los equipos técnicos pedagógicos de la Dirección de Educación Superior y de la Dirección de Información, Evaluación y Planeamiento del Consejo General de Educación, es docente en los niveles superior no universitario y superior universitario en espacios de práctica. Además forma parte del equipo de la Secretaría Académica de la FCyT- UADER. “Desde estos espacios elaboro distintas propuestas y materiales de trabajo, como así también, pensamos, al interior de los equipos y de los espacios, dispositivos de acompañamiento a docentes y a estudiantes”. Además, desde hace varios años coordina el equipo que desarrolla las propuestas correspondientes al Programa Nacional de Formación Permanente y las jornadas institucionales para el Nivel Superior no Universitario.
“Los equipos de trabajo son fundamentales –expresa María de los Ángeles–, conversar, producir con otros siempre brinda “otros aires” y nos interpela a poner en cuestión imaginarios, conceptos, posicionamientos, supone un contra-movimiento que nos acompaña a sorprendernos y habilita las condiciones para que sea posible pensar otras cosas”.
En ese marco, las condiciones impuestas por la pandemia “nos llevaron a poner en debate diversas cuestiones al interior de las instituciones, como por ejemplo, los modos en que se piensan, se llevan adelante y se acompañan las prácticas docentes. En este sentido, celebro que esta crisis haya habilitado la posibilidad de re-negociar sentidos de manera colectiva y abrir debates epistemológicos al interior del nivel superior”.
Para terminar, María de los Ángeles Fernández vuelve a agradecer “profundamente haber transitado el Profesorado y la Licenciatura en Ciencias de la Educación, valoro las experiencias que cada docente propuso y acompañó y renuevo mi apuesta política, social y pedagógica a la universidad pública entrerriana”.