María Julia Rodríguez es Licenciada en Comunicación Social graduada en la FCEDU y hace más de 20 años que vive en México | Se ha desempeñado en múltiples roles como comunicadora, desde la experiencia fundante como productora audiovisual del Centro de Producción en Comunicación y Educación hasta la asesoría freelance en Educación a Distancia | Su experiencia, en primera persona.
“Todavía me acuerdo cuando a los 17 años me inscribí en la facultad, me acompañó mi mamá, era una adolescente recién salida de la secundaria y tenía la intención de ser periodista, entonces me pareció que en la carrera de Comunicación podía ser, pero cuando comencé a cursar me entusiasmé mucho más con la imagen”, cuenta María Julia Rodríguez. Uno de los recuerdos más vívidos que tiene de esa época “es la primera vez que entré al laboratorio de imagen a hacer revelado de fotografía”: “Realmente fue una sensación majestuosa, divina, ver cómo se creaba la imagen en blanco y negro, estoy hablando de la década del 80”.
Cuando estaba terminando tercer año, se abrió una convocatoria para participar como estudiante en la creación del Centro de Producción en Comunicación y Educacion (CEPCE). “Me anoté y empecé a trabajar como productora audiovisual. Se formó un grupo de docentes y estudiantes de la carrera de Comunicación y algunos de Educación y empecé a hacer mis primeras armas laborales. Estuve en el Centro de Producción diez años y 14 en total en la FCEDU y realmente recuerdo esa época como de mucho aprendizaje, de convivir, siendo joven, con personas que tenían una experiencia gigante, gente que venía del exilio como por ejemplo Humberto Ríos, José Carlos González, personas que nos enseñaban no solamente en lo académico sino también en lo personal”.
Egresó en agosto de 1998 y en 1999 viajó a España a hacer una Maestría en Comunicación Audiovisual. “La Maestría fue en la Universidad Internacional de Andalucía, al sur de España, y una de las riquezas que tenía era que todos los alumnos éramos de diferentes países de Latinoamérica. La tesis sobre la que trabajé para graduarme fue sobre la creación de un canal de televisión universitario. Para esa época, cuando me fui a España, aunque ya tenía el título bajo el brazo no sabía exactamente qué camino laboral iba a tomar porque quería salir de Paraná, de donde es mi familia y donde yo viví hasta ese momento, pero no sabía dónde ir y tampoco tenía muy claro a qué me quería dedicar, sí qué mi camino laboral iba a estar relacionado con instituciones educativas“.
México: un lugar en el mundo
En enero del 2000 armó las valijas, compró un pasaje “con 500 dólares que tenía ahorrados y me lancé a la aventura de México”. “A través de uno de mis compañeros de Maestría, un mexicano, conseguí una entrevista para un probable trabajo. Al poco tiempo de llegar, me contrataron e ingresé a trabajar en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, actualmente, Tecnológico de Monterrey o TEC de Monterrey, que es una de las universidades privadas más importantes de México y que en ese momento era pionera en los estudios de Educación a Distancia, es decir, en implementar en las clases de Licenciatura, Maestrías y Doctorados la educación a distancia con plataformas como Lotus, como Blackboard”.
María Julia recuerda que “fue algo realmente shockeante” por la estructura de la Universidad y sus múltiples campus. Empezó a trabajar como productora audiovisual para el área institucional y como apoyo a las clases que daban para toda la República. Después de algunos años, le ofrecieron hacerse del Centro de Medios como directora: “era algo que yo no había pensado pero decidí aceptarlo, entonces, a partir de ahí mi trabajo fue más a lo administrativo, relacionado con comunicación pero no tanto en la producción. Solicité una beca para estudiar la Maestría en Administración, empecé a dejar un poco la producción y me empecé a volcar más en lo que tiene que ver con Coordinación de Equipos, con desarrollo de Personal, con capacitaciones”, relata.
Su última experiencia como profesora en Educación Formal fue dentro de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM): “Estuve durante tres años trabajando en un Diplomado de comunicación y marketing digital, en la Facultad de Artes y Diseño. Lo coordinaba a través de la plataforma Moodle, así es que fue una nueva experiencia de aprendizaje, tanto el uso de la plataforma como el marketing digital que para mi era algo absolutamente nuevo”.
Desde 2014 trabaja como freelance y ya lleva más de 20 años viviendo en México. “Para mí es mi casa, ya soy ciudadana de este país, así que considero que tengo la riqueza y la fortuna de tener dos países, me considero argenmex”, se define. “Aunque no vivo en Paraná hace mucho tiempo, cada año voy para allá, adonde no he vuelto casi es la facultad, creo que desde 2000 para acá solo fui tres veces y, sin embargo, es un lugar que siempre, cuando paso por la puerta miro con enorme afecto, con muchísimo agradecimiento”.
El ayer y el hoy
Recuerda que cuando estaba estudiando en la carrera de Comunicación eran los primeros años del Plan 85 “y había contenidos que por ahí se superponían, cosas que faltaban, la sensación que tenía en algunos momentos era de que la carrera abarcaba mucho y no era nada específico. No sabía a qué me iba a dedicar, la idea de ser periodista había quedado muy atrás y no tenía un objetivo definido”.
“Pero después con el tiempo entendí que, por lo menos para las personas como yo, que no me gusta estar atada en un lugar ni en un trabajo, la carrera de Comunicación es la ideal porque me permite trabajar en diferentes áreas. He dado clases, actualmente estoy dando servicios de comunicación, hago capacitaciones, saco fotos, por ahí edito videos, colaboro con una persona que hace tiendas en línea, entonces creo que la formación que tengo, que empezó en la Facultad y que fui adquiriendo a lo largo de mi vida profesional, ha sido muy heterogénea y a veces cuando veo mi curriculum, digo, me gustaría tener alguna Especialización, pero creo justamente que esa es la riqueza en lo profesional, la variedad de cosas que puedo hacer. Si bien soy Comunicóloga, como se dice acá en México, creo que tengo infinitas posibilidades para continuar trabajando en lo que quiera y eso es una riqueza que yo conocí en la FCEDU siendo estudiante“.
De la Facultad recuerda, fundamentalmente, el cimbronazo de primer año, luego materias como Análisis del Discurso, Lenguaje y Comunicación, “el trabajo en equipo y el rigor académico para la investigación, la influencia que ciertos profesores tuvieron en mí, que me ayudaron a desarrollar un pensamiento crítico”. “Recuerdo esa época de legados: alguien me tendió la mano para que yo avance, crezca, desarrolle y aprenda y después a mí me tocó hacer lo mismo, eso del trabajo en equipo, de la colaboración, de la solidaridad creo que es de lo más destacable que recuerdo de aquellos años universitarios”, dice para terminar.
Producción general: Belén Cacik