Se realizó una muestra interactiva el 6 y 7 de junio con participación de escuelas.
Tras un proceso de producción de más de dos años, se presentó en la FCEDU el prototipo del libro-objeto «Recuperar el cuerpo», una producción colectiva ganadora de la convocatoria «Universidad, Diseño y Desarrollo Productivo» de la Secretaría de Políticas Universitarias en 2015. El jueves 6 y viernes 7 de junio se instaló en el edificio de Alameda de la Federación 105 una muestra interactiva del proceso de producción del libro, con algunas de sus partes realizadas a escala humana.
Visitaron la muestra niñas y niños de escuelas primarias de Paraná y Crespo así como estudiantes de Artes Visuales, Profesorados y de las carreras de la FCEDU. Además, en este marco, se realizaron dos talleres de Pop-up coordinados por Gito Petersen.
El equipo de «Recuperar el cuerpo» estuvo integrado por Fortunato Gallizi, Lucrecia Grubert, María Florencia Hernández Ros y Regina Kuchen, como integrantes del Área Gráfica; Gito Petersen como artista plástico; Lea Lvovich y Erika Bidal, desde la Agencia Radiofónica de Comunicación; y Cira Monge, Agostina Giarroso, Sofía Guesner, María Clara Sidler e Ingrid Grau, como estudiantes, becarias y docentes independientes.
La experiencia fue fundamentalmente de disfrute, relatan Fortunato Galizzi, Lea Lvovich y Erika Bidal, tanto para el equipo productor como para quienes recorrieron la muestra y participaron de las actividades que dejaron «encantado» el edificio de Alameda 105.
Por qué un libro-objeto
«Intervienen ya no las cosas tradicionales de un libro común, como conocemos, sino que confluyen un montón de técnicas que lo conforman en un objeto en sí mismo: popup, cosas desplegadas y otros recursos y técnicas nuevas –como la realidad aumentada. Es un libro que al abrir cada una de sus páginas, como en tercera dimensión, cobran vida», contó Gito Petersen.
Fortu Gallizi, por su parte, señaló que la propuesta «es un viaje a través de los sentidos y los recorridos pueden ser varios todos metido en un libro objeto». De este modo, el libro objeto «se transforma como en un juego de mesa, a los que interactúan los lleva por un laberinto que se va resolviendo con las diferentes técnicas.Es como jugar, cumplir el sueño del pibe».
Precisamente, el objetivo era dirigirse a niños y niñas que ya están transitando la escuela primaria, para incentivar el retorno al cuerpo: «En el preescolar el niño es tenido en cuenta con todos sus sentidos. Después, la educación es cada vez es más mental, racional. Nos preguntábamos cómo, desde la materialidad del libro, podemos invertir ésto. La idea es que el chico pueda ponerse con todos los sentidos», completó Gallizi, acerca de la idea que fue impulsada originalmente y durante todo el proceso por Regina Kuchen, Coordinadora del Área Gráfica del Centro de Producción en Comunicación y Educación.
El Área Gráfica y la Agencia Radiofónica de Comunicación del CePCE trabajaron juntas en este proyecto que pudo concretarse como muestra a través de un Proyecto de Innovación Pedagógica.
El prototipo final -pasaron por varios- tiene 1,30 por 1,40 desplegado. «En este momento este tipo de libros se imprimen en China. Lo nuestro ha sido mucha experimentación. Para llegar a una de las estaciones o de los mecanismos, capaz que hubo que hacerlo 20 veces. Pero sí nos interesaría hacer 10 o 20 copias del prototipo, para que circule por las escuelas», afirma el equipo.
Aunque el producto está pensado para un público infantil y ya se prevé visitar escuelas de Paraná a través de un convenio con el CGE, Galizzi remarca que después de la experiencia de la muestra interactiva se anima a pensarlo también para adultos: «la búsqueda nuestra está orientada a chicos de 8 o 10 años, ahora, eso yo te lo decía una semana atrás, capaz que a una persona de 70 años le brillaban los ojitos y para nosotros eso es magia».