Vanina Cardú es profesora en Ciencias de la Educación, Especialista en Metodologías de la Investigación y en la actualidad se encuentra realizando el Doctorado en Ciencias Sociales de la UNER | Desempeña funciones de asesoramiento pedagógico en una escuela pública de nivel medio de Paraná y es docente en las cátedras de Trabajo intelectual y Técnicas Cualitativas en la Facultad de Ciencias de la Gestión (UADER) | En la FCEDU está en proceso de adscripción en la cátedra de Investigación en Educación
Por Juan Legaria, en el marco de su práctica curricular para la Secretaría de Investigación y Posgrado
El martes 13 de agosto, Cardú presentará en la FCEDU los resultados de su estudio “Recorrido de la investigación en Educación. Huellas de los proyectos, equipos, campos disciplinares y abordajes metodológicos. Facultad de Ciencias de la Educación (UNER) 1997 – 2016”, realizado en el marco de la carrera de Especialización en Metodologías de la Investigación de la Facultad de Ciencias Económicas. El trabajo estuvo orientado a la búsqueda de huellas particulares en los proyectos, los equipos, los campos disciplinares desarrollados y las metodologías de investigación utilizadas en las producciones de la Facultad durante dos décadas.
Sobre los orígenes de sus interrogantes, Vanina afirma que «en el año 2016 tuve la posibilidad de empezar la Especialización en Metodologías de la Investigación que ofrece la UNER. Creo que ese momento representa una bisagra en la profesionalización y formación de mi carrera. Es entonces cuando decido encarar el trabajo final centrado en la investigación en Educación realizada en la Facultad. Esto surge, sobre todo, a partir de una inquietud personal, de la percepción de cierto vacío de conocimientos en relación con las temáticas, los problemas, que han sido objeto de interés a lo largo de la historia reciente de la institución».
Ciencia e Investigación
«La ciencia debe ser ubicada en las sociedades actuales, que nos presentan una gran complejidad. Las ciencias sociales, en particular, tienen por delante el desafío de abrirse a distintos tipos de saberes: correrse de esa idea de ‘saber autorizado’, ‘erudito’. Más en el campo de la educación», señala.
En términos generales, Cardú destaca que otro camino que resta aún recorrer es el de lograr una vinculación más estrecha entre el sentido de las investigaciones y su contribución a la sociedad: «En mi tarea de doctoranda estoy interesada en seguir esa pista: cómo las investigaciones, la ciencia, se vinculan con las realidades sociales. Creo que allí hay un punto ético que no hay que descuidar: entender que las ciencias, el trabajo de investigadores e investigadoras tiene una condición política».
Primeras experiencias en Investigación
Sobre su acercamiento inicial a la investigación educativa, Cardú recuerda que «en 1995, la cátedra de Evaluación invitó a los estudiantes a ser parte de los procesos que ellos llevaban a cabo evaluando una institución secundaria desde una mirada de Investigación Evaluativa; y en años subsiguientes también participé de proyectos dirigidos por Mabel Pipkin”. Su incorporación como
auxiliar docente alumna de la cátedra Didáctica II –con las profesoras Victoria Baraldi y María Amelia Migueles– le brindó la oportunidad de incorporarse a un seminario interno que tenía como objetivo la iniciación en investigación de los estudiantes: entonces, afirma, «tuvo protagonismo, pude acompañar a los alumnos en el proceso y ayudarlos. Quedé muy interesada”.
Ya desde 2010 se incorpora formalmente en condición de integrante en diversas actividades de investigación en la Facultad de Gestión (UADER).
El estudio: “Recorrido de la investigación en Educación…”
Para su abordaje de la investigación en la FCEDU, que contó con la dirección de Ana María Bartolini, Vanina Cardú optó por un recorte temporal de dos décadas (1997 – 2016) y por un diseño flexible, que combina métodos cuantitativos y cualitativos, apelando a técnicas de análisis documental de un extenso corpus de proyectos y a fuentes secundarias –como las publicaciones de los informes de investigación.
Sobre los resultados que compartirá en su charla del 13 de agosto, la entrevistada afirma que «un capítulo que me parece muy interesante de la parte cuantitativa es la mirada a los equipos de investigación: tamaños, continuidad, la distinción de becarios, quiénes asumieron funciones de dirección y quienes hicieron un recorrido -de becario a director. Esa ‘mirada histórica’ dentro de lo
cuantitativo aporta una característica más cualitativa».
En la segunda parte del trabajo, relata, se abordan cuestiones tales como la identificación de los principales temas y preguntas de investigación y otros aspectos, que le permitieron delimitar siete campos disciplinares que orientaron la investigación de los fenómenos educativos realizada en la FCEDU durante veinte años.
Finalmente, otro aspecto que destaca es el que se vincula con el predominio de un abordaje metodológico particular: «Tanto de mi propio estudio como de las lecturas que he realizado se puede inferir que en Argentina ha habido una tendencia a hacer trabajos cualitativos y han escaseado los cuantitativos. Entiendo que uno de los principales motivos consiste en la escasa formación en las herramientas propias de lo cuanti; sobre todo, en lo que respecta al profesorado en Educación –a diferencia quizás de las licenciaturas”.